Paco Lagares

Antonio Carvajal. TROPOS

 

TROPOS PARA PACO LAGARES

 

Por el aroma del café se sabe

que comienza el trajín de la mañana;

por verde, la doméstica sabana

canta que abril no es cruel, sino suave;

 

en la constelación del sueño cabe

con perfume redondo la manzana

y lo que cuenco fue será campana

y, lo que cardo, el ala de algún ave;

 

la copa rota su residuo abraza,

la red de vidrio contra el cielo traza

la trampa vertical de su agonía

 

mientras el sol se expande por la aurora,

el alma enciende, el cuerpo opaco dora

y lo tinta de vida y alegría.

 

Antonio Carvajal